Aficionados a la agricultura, aquí está vuestro futuro, vamos a hablar del cultivo hidropónico en macetas. ¿De qué se trata? ¿Para qué sirve? En efecto, como todas las novedades, esta nueva forma de cultivar también trae consigo cierta desconfianza y también muchos interrogantes.
El cultivo hidropónico es muy antiguo. Las primeras pruebas se remontan incluso a la antigua Babilonia. Se utiliza un sustrato inerte que retiene excelentemente el agua y la solución nutritiva, así como macetas creadas y estructuradas para garantizar una humedad constante para las raíces de las plántulas colocadas en su interior.
Un redescubrimiento de cómo nuestros antepasados sabían aprovechar cada planta frutal, cada hierba medicinal y todo lo que la naturaleza regalaba a la humanidad. De hecho, con el cultivo hidropónico en macetas, siempre se obtiene una producción de fruta muy alta y de buena calidad sin necesidad de utilizar hormonas, fertilizantes comerciales ni pesticidas.
El cultivo adecuado para cada lugar
¿Por qué el cultivo hidropónico en macetas es el futuro? Porque se controla en cada etapa del crecimiento de la planta. A nivel planetario, asistimos a continuos cambios climáticos, que también son culpa de la mano del hombre que está alterando enormemente el aspecto de la naturaleza. Las plantaciones naturales se enfrentan a nuevos climas, a sequías excesivas y también a una considerable falta de nutrientes en el suelo.
Con el cultivo hidropónico en macetas, podemos tener un control total sobre los nutrientes indispensables para el desarrollo de las plantas. Gracias a esta técnica, también controlamos la humedad de las raíces.
Una vez que hemos creado el sustrato ideal para que crezca nuestra plántula, podemos dedicarnos a cuidarla rellenando la tierra con una solución óptima de nutrientes y agua. En comparación con el cultivo tradicional, también evitamos el desarrollo de patógenos o la formación de podredumbre basal que literalmente mata a la planta.
Precisamente por eso, para evitar también el uso de pesticidas, se recomienda el cultivo hidropónico en maceta, que también pueden hacer los particulares para tener su propio huerto que dé muchos frutos buenos y sabrosos.
Mediante el uso de macetas adecuadas, el agua y los nutrientes llegan directamente a la planta y no hay dispersión. De hecho, está certificado que el cultivo hidropónico en macetas también reduce significativamente el desperdicio de agua.
Las mejores macetas para el cultivo hidropónico
¿Cuáles son las mejores macetas para el cultivo hidropónico? Al tratarse de una nueva técnica de cultivo, no todos podemos ser expertos, pero con las herramientas adecuadas y, en particular, con las macetas adecuadas, podemos esperar sin duda buenos resultados.
El modelo Eracle es una maceta redonda con agujeros y canales o surcos que ayudan a mantener una buena aireación del suelo y permiten que las raíces respiren y crezcan fuertes. Los surcos presentes ayudan a mantener un excelente drenaje del agua y, por tanto, también una buena humedad interna.
La forma de las macetas es muy importante para ayudar a las raíces a crecer. Para que las plantas tengan un excelente paso de agua y aire, cuando se trata de pequeños plantones como los arándanos, se recomiendan las macetas cuadradas disponibles en diferentes tamaños.
El cultivo hidropónico en macetas es la agricultura del futuro y usted puede ser el pionero de esta técnica.
